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Mucha ignorancia acerca de enfermedades sexuales en los jóvenes

Por Amanda Gardner
Reportera HealthDay

Martes, 6 de abril (HealthDayNews) -- La falta de conocimiento de los estadounidenses podría colocarlos en riesgo de enfermedades de transmisión sexual, de acuerdo con una reciente encuesta.

Aunque 84 por ciento de los encuestados por la Asociación Americana de la Salud Social (ASHA, por sus siglas en inglés) indicaron que tomaron las precauciones necesarias para protegerse durante la actividad sexual, las preguntas de seguimiento demostraron lo contrario. Cuarenta y cinco por ciento admitieron que no usaron protección durante el coito vaginal; 66 por ciento reportó no usar protección durante sexo anal; 91 por ciento indicó que no usaron protección durante sexo oral.

Además, 68 por ciento afirmó no estar preocupado por contraer una enfermedad de transmisión sexual (ETS). Y uno de cada tres nunca había discutido las ETS con su pareja.

El doctor James Allen, presidente de ASHA y anterior cirujano general auxiliar de los EE.UU., expresó que estaba "angustiado" por los hallazgos.

"Las personas piensan que saben mucho y, de hecho, no sabe tanto como piensan que saben cuando llegamos a preguntas específicas, o lo que las personas realmente hacen no coincide con el nivel de conocimiento que dijeron tener", expuso.

De acuerdo con ASHA, uno de cada cuatro estadounidense se infectará con ETS en algún punto en su vida. En el 2000, hubo casi 19 millones nuevas infecciones, lo que cuesta un estimado de $8 mil millones para diagnóstico y tratamiento.

La encuesta, que interrogó 1,155 personas entre las edades de 18 y 35 años como parte del Mes de Concienciación de ETS en abril, se concentró básicamente en actitudes hacia la hepatitis. El gigante farmacéutico GlaxoSmithKline que fabrica vacunas contra la hepatitis A y B, financió la encuesta.

"Ciertamente, todos estamos al tanto de que Glaxo es un fabricante, pero no sólo fabricante de vacunas contra la hepatitis. Pero este asunto de hepatitis A y B como enfermedades de transmisión sexual y unas que se pueden prevenir es uno muy importante", comentó Allen.

Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades está financiando a la ASHA para investigar la hepatitis en hombres quienes tienen sexo con hombres.

Aunque muchos casos de hepatitis no son una amenaza seria a la salud, la enfermedad puede a veces tornarse crónica y podría conducir a lesión hepática y muerte. En muchos casos, no obstante, la hepatitis viral es una enfermedad de "solución propia", de acuerdo con la ASHA.

Las hepatitis A, B y C son los tipos más comunes de la enfermedad y pueden transmitirse sexualmente a varios grados. Sólo hay vacunas para la A y la B. Las cepas A y B causan más de 170,00 infecciones y 5,000 muertes en los Estados Unidos anualmente.

Aun así los encuestados demostraron que su conocimiento acerca de la hepatitis fue incluso más limitado que para otras ETS, incluyendo VIH y herpes.

Más de la mitad (57 por ciento) no sabían que la hepatitis A es de transmisión sexual, mientras que 44 por ciento no se dio cuenta de que la hepatitis B podría transmitirse de esta forma. Casi todos (97 por ciento) sabían que el VIH se puede transmitir sexualmente.

"Las personas no conocen la hepatitis", indicó Allen. "Es fácil confundirse, es fácil confundir las pruebas y las diferencias entre la hepatitis A, B y C".

La discrepancia es preocupante porque la hepatitis B puede ser 100 veces más contagiosa que el VIH y es más común. Una de cada 20 personas se infectará con hepatitis B en algún momento en su vida, pero muchos no lo sabrán porque a menudo no presenta síntomas.

Más de la mitad (55 por ciento) de los encuestados no sabían que la hepatitis A se puede prevenir con una vacuna; 42 por ciento no sabían que existe una vacuna para la hepatitis B. Más de la mitad (60 por ciento) no habían sido vacunados o no sabían si habían sido vacunados contra los virus.

Dos de cada tres personas encuestadas tuvieron algún riesgo de infección y 90 por ciento dijo que su proveedor de salud nunca había recomendado la vacunación.

Los estadounidenses tampoco están hablando de las ETS. En esta encuesta, 93 por ciento de los que respondieron dijeron que su pareja actual o más reciente no tenía ETS, un tercio nunca había discutido el tema con su pareja. Levemente más de la mitad (53 por ciento) indicó que su pareja había sido examinada. Menos de la mitad informó haber hablado con su proveedor de salud acerca de las ETS.

"Los asuntos de salud pública del siglo XXI se relacionan con el comportamiento. Tenemos muchas alternativas individuales", expresó Allen. "El asunto no es sólo uno de salud sexual. Es un tema que se expande mucho más . . . ¿Cómo ayudamos a crear el ambiente en nuestro país donde las persona desean realizar alternativas de salud y se apoya a eso? ... ¿Cómo creamos un ambiente en el cual nuestros jóvenes se sienten apoyados a retrasar la iniciación del contacto sexual o a ser sexualmente activo en una manera responsable?".

Más información

ASHA tiene información sobre enfermedades de transmisión sexual y específicamente sobre la hepatitis.

(Fuente: James Allen, M.D., presidente y CEO, Asociación Americana de Salud Social, y anterior cirujano general auxiliar de los EE.UU., Research Triangle Park, N.C., encuesta ASHA abril 2004)

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