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La infección
genital por VPH es una enfermedad de transmisión sexual
(ETS), causada por el virus del papiloma humano (VPH). El virus
del papiloma humano es el nombre que se le da a un grupo de virus
que incluye más de 100 tipos o cepas diferentes. Más
de 30 de estos virus son transmitidos sexualmente y pueden infectar
el área genital de hombres y mujeres, que incluyen la piel
del pene, la vulva (área fuera de la vagina) o el ano y
los revestimientos de la vagina, el cuello uterino o el recto.
La mayoría de las personas que quedan infectadas por VPH
no presentarán síntomas y la infección desaparecerá por
sí sola.
Algunos tipos de estos virus son llamados de “alto riesgo” y
pueden revelar resultados anormales en las pruebas de Papanicolaou.
Estos virus también pueden provocar cáncer de cuello
uterino, de vulva, de vagina, de ano o de pene. Otros tipos de virus
son llamados de “bajo riesgo” y pueden arrojar resultados
con anormalidades leves en las pruebas de Papanicolaou o causar verrugas
genitales. Las verrugas genitales son abultamientos o crecimientos únicos
o múltiples que aparecen en el área genital y en ciertas
ocasiones tienen forma de coliflor.
Aproximadamente
20 millones de personas están infectadas actualmente con
el VPH. Al menos el 50 por ciento de las mujeres y hombres sexualmente
activos contraerán la infección genital del VPH en
algún momento de sus vidas. Por lo menos el 80 por ciento
de mujeres habrá contraído una infección genital
del VPH al llegar a los 50 años de edad. Cerca de 6.2 millones
de estadounidenses contraen una nueva infección genital
del VPH cada año.
Los tipos de VPH
que infectan el área de los genitales se propagan principalmente
mediante el contacto genital. La mayoría de las infecciones
por VPH no presentan signos ni síntomas; por esta razón,
la mayoría de las personas que tienen la infección
no se dan cuenta de que están infectadas, sin embargo sí pueden
transmitir el virus a su pareja sexual. En muy contados casos,
una mujer embarazada puede transmitir el VPH a su bebé durante
el parto vaginal. A un bebé que está en contacto
con el VPH muy pocas veces le salen verrugas en la garganta o en
la laringe.
La mayoría
de personas que tienen infección genital por VPH no saben
que están infectadas. El virus vive en la piel o en las
membranas mucosas y generalmente no causa síntomas. A ciertas
personas les saldrán verrugas genitales visibles o presentarán
cambios precancerosos en el cuello uterino, vulva, ano o pene.
En muy contadas ocasiones, la infección por VPH puede causar
cáncer anal o genital.
Las verrugas genitales aparecen, por lo general, como elevaciones
o masas suaves y húmedas, rosadas o de color de la piel, usualmente
en el área genital. Las verrugas pueden ser planas o elevadas, únicas
o múltiples, pequeñas o grandes y, en ciertos casos,
tener forma de coliflor. Pueden aparecer en la vulva, la vagina o
en el ano o alrededor de los mismos, en el cuello uterino y en el
pene, en el escroto, en la ingle o los muslos. Las verrugas pueden
aparecer semanas o meses después del contacto sexual con una
persona infectada o puede que no aparezcan.
Las
verrugas genitales se diagnostican por examen visual. Las verrugas
genitales visibles pueden ser eliminadas con medicamentes que se
aplica el propio paciente o con un tratamiento realizado por un
proveedor de atención médica. Algunas personas deciden
no hacerse tratamiento para ver si las verrugas desaparecen por
sí solas.
No hay un tratamiento para las verrugas genitales que sea mejor que
el otro y no hay un tratamiento ideal para todos los casos.
A la mayoría
de las mujeres se les diagnostica el VPH sobre la base de resultados
anormales en las pruebas de Papanicolaou. La prueba de Papanicolaou
es la herramienta primaria de detección del cáncer
cervical o cambios precancerosos en el cuello uterino, muchos de
los cuales están relacionados con el VPH. Asimismo, existe
una prueba específica para detectar el VPH en el ADN de
las mujeres (prueba de ADN del VPH). La prueba puede realizarse
en mujeres con resultados anormales leves en las pruebas de Papanicolaou
o en mujeres mayores de 30 años de edad al momento de la
realización de la prueba de Papanicolaou. Los resultados
de la prueba de ADN del VPH pueden ayudar a los proveedores de
atención médica a decidir si se necesitan pruebas
o tratamientos adicionales.
No existen pruebas para detectar el VPH en los hombres.
No hay “cura” para
la infección por VPH, aunque en la mayoría de las
mujeres la infección desaparece por sí sola. Los
tratamientos administrados buscan atender los cambios en la piel
o en la membrana mucosa causados por la infección por VPH,
como verrugas y cambios precancerosos en el cuello uterino.
Todos los tipos
de VPH pueden arrojar resultados con anormalidades leves en las
pruebas de Papanicolaou que no tienen consecuencias graves. Aproximadamente
10 de los 30 tipos de infección genital por VPH identificados
pueden provocar, en casos raros, cáncer cervical. Las investigaciones
han demostrado que en la mayoría de las mujeres (90 por
ciento), la infección por VPH cervical se vuelve indetectable
en un período de dos años. A pesar de que solo una
pequeña proporción de mujeres tiene una infección
persistente, la infección persistente por VPH de los tipos
de “alto riesgo" constituye el riesgo de cáncer
cervical más importante.
La prueba de Papanicolaou puede detectar células precancerosas
y cancerosas en el cuello uterino. La realización de pruebas
de Papanicolaou periódicas y un seguimiento médico
cuidadoso, con tratamiento si es necesario, puede ayudar a asegurar
que los cambios precancerosos en el cuello uterino causados por la
infección por VPH no se conviertan en un cáncer cervical
que pueda ser mortal. La realización de la prueba de Papanicolaou,
utilizada en los programas de detección de cáncer cervical
en los Estados Unidos, ha reducido ampliamente las muertes por cáncer
cervical. La Sociedad Americana del Cáncer calcula que, para
el año 2004, cerca de 10,520 mujeres contraerán cáncer
cervical invasivo y cerca de 3,900 mujeres morirán de la enfermedad.
La mayoría de las mujeres que contraen cáncer cervical
invasivo no se han hecho exámenes periódicos de detección
del cáncer cervical.
La forma más
segura de eliminar el riesgo de la infección genital por
VPH es evitar el contacto genital con otra persona.
Si las personas
deciden ser sexualmente activas, la mejor estrategia para prevenir
infecciones genitales por VPH en el futuro, es tener una relación
duradera, mutuamente monógama, con una pareja a quien se
le han hecho las pruebas y se sabe que no está infectada.
Sin embargo, es difícil determinar si una pareja que ha
sido sexualmente activa en el pasado está infectada en la
actualidad.
Las personas que
decidan ser sexualmente activas y no están en una relación
duradera y mutuamente monógama pueden reducir el riesgo
de infección genital por VPH al reducir el número
de parejas sexuales y seleccionar una pareja que tenga menos probabilidad
de estar infectada. Las parejas que tienen menos probabilidad de
estar infectadas son aquellas que no han tenido una pareja sexual
o que han tenido pocas parejas sexuales en el pasado.
La infección
por VPH puede aparecer tanto en las áreas genitales masculinas
como las femeninas, estén o no cubiertas o protegidas con
un condón de látex. Aunque se desconoce el efecto
de los condones en la prevención de la infección
por VPH, se ha asociado el uso del condón a una tasa más
baja de cáncer cervical, el cual es una enfermedad relacionada
con el VPH.
División
para la Prevención de ETS (DSTDP, por sus siglas en inglés)
Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades
www.cdc.gov/std
ASHA
- National HPV and Cervical Cancer Prevention Resource Center
www.ashastd.org/VPHccrc/index.html
Para
preguntas personales sobre salud y solicitud de información
acerca de las ETS:
Líneas
nacionales gratuitas de información de los CDC sobre
ETS y SIDA
(800) 227-8922 ó (800) 342-2437
En español: (800) 344-7432
TTY para sordos y personas con limitaciones auditivas: (800) 243-7889
National
HPV and Cervical Cancer Prevention Hotline
(919) 361-4848
Recursos:
Red
nacional de información sobre la prevención de
los CDC (CDC National Prevention Information Network, NPIN)
P.O. P.O. Box 6003
Rockville, MD 20849-6003
1-800-458-5231
1-888-282-7681 Fax
1-800-243-7012 TTY
Correo electrónico: info@cdcnpin.org
www.cdcnpin.org
Asociación
Americana de Salud Social
(American Social Health Association, ASHA)
P.O. Box 13827
Research Triangle Park, NC 27709-3827
1-800-783-9877
www.ashastd.org
Preguntas sobre ETS: std-hivnet@ashastd.org
Fuentes:
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Treatment
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