La medicina alternativa y su hijo
Mientras recorre los pasillos de su tienda local de productos naturales,
usted se topa con uno lleno de frascos que parecerían pertenecer a una farmacia.
Si levanta la vista, se dará cuenta de que se encuentra en el pasillo de la
medicina alternativa.
Leer la expresión "medicina alternativa" puede evocar imágenes de infusiones
de hierbas acre, cataplasmas, cantos o meditación. De hecho, los remedios a base
de hierbas y la meditación, así como docenas de otros tratamientos, se incluyen
en la categoría de medicina alternativa y complementaria. Aunque no existe una
definición estricta para medicina alternativa, por lo general incluye cualquier
práctica de curación que no forme parte de la medicina tradicional -es decir,
cualquier práctica que no se imparte de forma generalizada en las facultades de
medicina ni es usada frecuentemente por los médicos o los hospitales.
Pero las fronteras de la medicina alternativa cambian constantemente en los
Estados Unidos, a medida que los médicos aceptan cada vez más los distintos
tipos de tratamientos y los pacientes los solicitan con más frecuencia. Algunas
prácticas (como la hipnosis), que se consideraban absurdas hace veinte años, se
consideran ahora terapias útiles en adición a la medicina tradicional. ¿Puede la
medicina alternativa ayudar a su hijo?
Tipos de cuidado alternativo
El Centro Nacional
para la Medicina Alternativa y Complementaria (National Center for Complementary
and Alternative Medicine, NCCAM) en los Institutos Nacionales de la Salud
(National Institutes of Health) reconoce siete áreas generales de medicina
alternativo (algunas de los cuales han sido sometidas a rigurosas pruebas
científicas, pero otras muchas no).
Los sistemas médicos alternativos por lo general no forman parte del
sistema médico convencional de médicos y hospitales. Incluyen la
acupuntura, la práctica de los puntos estimulantes del cuerpo
(generalmente con agujas) para fomentar la curación; la medicina tradicional
oriental, centrada en diagnosticar los trastornos de energía en el cuerpo;
la homeopatía, que trata los problemas de salud con sustancias muy
diluidas; y los otros sanadores de la comunidad como las comadronas, los
herbolarios y los practicantes de la medicina de los amerindios.
Los remedios a base de hierbas incluyen una amplia gama de plantas
usadas para la medicina o la nutrición. Pueden conseguirse en tiendas de
comestibles, en tiendas de alimentos naturales o a través de herbolarios, y a
menudo se presentan en forma de té, cápsulas y extractos. La Administración de
Alimentos y Drogas de los EE.UU. (FDA) no regula estas sustancias.
Aproximadamente un tercio de los estadounidenses adultos toma de forma regular
algún tipo de hierba, desde una taza de té de camomila para calmar los nervios
hasta la equinácea para combatir un resfriado.
La curación manual trata los problemas médicos manipulando y
realineando las partes del cuerpo. Quizá el método más conocido es la
quiropráctica, que se centra en el sistema nervioso y el reajuste de la
columna vertebral. Otras formas de curación manual son el masaje; la
medicina osteopática, que usa la manipulación además de la medicina
tradicional y el tratamiento quirúrgico; y la curación por contacto, en
que los que la practican ponen sus manos sobre o cerca del cuerpo del paciente
para dirigir la energía.
Introducir cambios en la dieta o el estilo de vida es un área de la medicina
alternativa que casi todos hemos practicado alguna vez. Muchas personas toman
nutrientes suplementarios si su dieta habitual no contiene suficientes
vitaminas o minerales y las personas con enfermedades crónicas como enfermedades
cardíacas o diabetes a menudo cambian su dieta (más cereales integrales y
verduras y menos sal o azúcar procesado) o hábitos (ejercicio regular) para
mantener el problema bajo control. Esta es una de las formas más útiles de
cuidados alternativos, ya que cambiar de hábitos y dieta no sólo ayuda a tratar
numerosas enfermedades, sino que también ayuda a prevenirlas. Esta parte de la
medicina alternativa es ampliamente aceptada por el modelo tradicional de
medicina.
El control de la mente y del cuerpo se centra en la función que ejerce
la mente sobre los trastornos que afectan al cuerpo. La hipnosis, un tipo de
sueño consciente o trance, puede ayudar a algunas personas a tratar las
adicciones, el dolor o la ansiedad, mientras que tratamientos como la
psicoterapia, la meditación y el yoga se usan para la relajación. Muchas
personas también acuden a grupos de apoyo y oración para enfrentarse a una
enfermedad y sentirse más conectadas a los demás.
Los fármacos y vacunas que aún no han sido aceptados por la medicina
tradicional también se consideran alternativos. Con el tiempo, después de muchas
pruebas y de la aprobación por parte de la FDA, algunas de estas medicaciones o
vacunas podrían convertirse en tratamientos prescritos de forma regular.
Finalmente, un área emergente de estudio se concentra en cómo los cambios en
los campos electromagnéticos del cuerpo pueden afectar la salud. El
bioelectromagnetismo se basa en la idea que las corrientes eléctricas de
todos los organismos vivos producen campos magnéticos que se extienden más allá
del cuerpo.