Es posible que la persona que tenga SIDA padezca infecciones
que usted puede contraer. Sin embargo, usted se puede proteger.
Hable con el médico o enfermera para determinar cuáles gérmenes
puede contraer usted así como otras personas de la casa. Esto
es muy importante si usted está infectado con el VIH.
Por ejemplo, la diarrea puede ser causada por varios gérmenes.
Utilice guantes desechables si tiene que limpiar lo que la persona
con diarrea haya ensuciado, o si tiene que ayudarla, lávese las
manos cuidadosamente después de quitarse los guantes. No utilice
los guantes desechables más de una vez.
Otra causa de diarrea es el parásito
cryptosporidiosis. Éste se transmite de las heces de una
persona o animal a otra persona o animal, con frecuencia a través
del agua, comida cruda o comida que no se ha cocinado suficientemente
bien y está contaminada. Lávese las manos después de ir al baño
y antes de preparar comida. Póngase en contacto con su departamento
local de salud para saber si el cryptosporidiosis está
en el agua. Si usted se entera de que el agua de su comunidad
podría tener parásitos de cryptosporidiosis, hierva el
agua que va a beber durante por lo menos un minuto para matar
el parásito, luego deje enfriar el agua antes de beberla. Tal
vez le convenga comprar agua embotellada (destilada) para cocinar
y beber si es posible que se halle en el agua el parásito cryptosporidiosis
u otros organismos que puedan transmitir enfermedades a una persona
con infección de VIH.
Si la persona con SIDA tiene tos durante más de una semana,
el doctor debería realizarle un examen de tuberculosis. Si el
resultado indica que tiene tuberculosis, entonces usted y todos
los que viven en la casa también deberían practicarse un examen
para determinar si tienen infección de tuberculosis, incluso si
no tienen tos. Si está infectado con gérmenes de tuberculosis,
usted puede tomar una medicina que impedirá que contraiga tuberculosis.
Si la persona con SIDA tiene ictericia
(un síntoma de hepatitis aguda) o tiene infección crónica de hepatitis
B usted y todas las personas que viven en la casa así
como cualquier persona que tiene relaciones sexuales con la persona
con SIDA debería consultar a su médico para determinar si deben
tomar alguna medicina para prevenir la hepatitis. Todos los niños
deberán recibir la vacuna de la hepatitis B independientemente
de que tengan contacto con una persona con SIDA o no.
Si la persona con SIDA tiene ampollas producidas por la fiebre
o por el frío (herpes simplex) cerca de la nariz o boca, no bese
ni toque las lesiones. Si tiene que tocar las lesiones para atender
a la persona, póngase guantes y lávese las manos cuidadosamente
tan pronto se quite los guantes. Esto es muy importante si usted
tiene eczema (piel alérgica)
ya que el virus herpes simplex puede causar enfermedades
graves de la piel en las personas con eczema. Deseche los guantes
usados; nunca utilice los guantes desechables más de una vez.
Muchas personas con o sin SIDA están infectadas con un virus
llamado cytomegalovirus (CMV),
el cual se propaga a través de la orina o la saliva. Lávese las
manos después de tocar la orina o saliva de la persona con SIDA.
Esto es muy importante en el caso de una mujer que podría estar
embarazada porque una mujer embarazada infectada con CMV podría
también transmitir el virus al niño que está por nacer. El CMV
causa defectos de nacimiento como la sordera.
Recuerde que para protegerse tanto usted como la persona con
SIDA de estas enfermedades y otras, asegúrese de lavarse las manos
con agua y jabón antes de atender a la persona, manipular alimentos,
después de quitarse los guantes y después de ir al baño.
Guantes
Debido a que el virus que causa el SIDA se halla en la sangre
de las personas infectadas, la sangre y otros fluidos corporales
(como heces sanguinolentas) que contengan sangre podrían transmitirle
el virus. Usted puede protegerse siguiendo algunas de las siguientes
recomendaciones: Póngase guantes si tiene que tocar semen, fluido
vaginal, cortes o lesiones de la persona con SIDA, o sangre o
fluidos corporales que puedan contener sangre. Póngase guantes
cuando tenga que tocar la boca, recto o genitales de la persona
con SIDA. Póngase guantes cuando tenga que cambiar pañales o compresas
higiénicas o vaciar patos u orinales. Si tiene cortes, lesiones,
sarpullidos o grietas en la piel, cúbralos con un vendaje o apósito.
Si el corte o lesión está localizado en la mano, use guantes y
apósitos. Póngase guantes para limpiar orina, heces o vómito a
fin de evitar todos los gérmenes, los del VIH y otros, que podrían
estar presentes.
Hay dos tipos de guantes que puede utilizar. Utilice guantes
desechables de látex como los que se utilizan en los hospitales
o guantes de vinilo para atender a la persona con SIDA en caso
de que usted pudiera tener contacto con sangre. Utilice los guantes
una sola vez, luego deséchelos. No utilice los guantes de látex
más de una vez incluso si están marcados como “reutilizables”.
Usted puede comprar en la mayoría de las farmacias cajas de guantes
como los que se utilizan en los hospitales, así como orinales,
patos y muchos otros materiales médicos. Muchas compañías de seguros
y Medicaid pagarán por estos guantes si el doctor los solicita
por receta. Para limpiar la sangre y otros fluidos sanguinolentos
del piso, cama, etc., puede utilizar guantes de goma de uso doméstico,
los cuales puede comprar en cualquier farmacia o supermercado.
Estos guantes se pueden limpiar y volver a utilizar. Límpielos
con agua caliente y jabonosa y una mezcla de cloro y agua (alrededor
de un cuarto de taza de cloro por un galón de agua). Asegúrese
de no utilizar guantes que estén pelados, agrietados o que tengan
agujeros. No utilice los guantes de goma para atender a la persona
con SIDA; son demasiado gruesos y voluminosos.
Para quitarse los guantes, tire de ellos hacia abajo volteándolos
al revés. De esta manera el lado mojado quedará hacia adentro,
lejos de su piel y de otras personas. Cuando se quite los guantes,
lávese las manos con agua y jabón inmediatamente. Si hay mucha
sangre, puede utilizar un delantal o una bata para que su ropa
no se ensucie de sangre. (Si la persona con SIDA sangra mucho
o con frecuencia, llame al médico o a la enfermera.) Limpie las
salpicaduras de sangre tan pronto como pueda. Póngase guantes,
limpie la sangre con toallas de papel o trapos, coloque las toallas
de papel o trapos en bolsas de plástico para desecharlos después,
luego limpie el área donde había sangre con una mezcla de agua
y cloro.
Como el VIH puede estar presente en la sangre, fluido vaginal
o leche materna así como en la sangre, usted debe tener tanto
cuidado con estos fluidos como con la sangre.
Si sangre, semen, fluido vaginal, leche materna o algún otro
fluido corporal que pudiera contener sangre llegara a entrar en
contacto con sus ojos, nariz o boca, enjuague inmediatamente con
agua abundante el sitio donde se salpicó con sangre, llame al
doctor, explique lo sucedido y pregunte qué otra cosa puede hacer.
Agujas y jeringas
Una persona con SIDA podría tener que usar jeringas y agujas
para recibir medicamentos para las enfermedades causadas por el
SIDA o para la diabetes, hemofilia, etc. Si usted tiene que manipular
estas agujas y jeringas, deberá tener cuidado de no pincharse.
Esta es una manera en la que usted podría infectarse con VIH.
Utilice una aguja y jeringa sólo una vez. No ponga las tapas
en las agujas nuevamente. No saque las agujas de las jeringas.
No rompa ni doble las agujas. Si se desprende una aguja de una
jeringa, utilice pinzas o un alicate para recogerla del suelo;
no utilice sus dedos. Toque las agujas y jeringas únicamente por
la parte de atrás de la jeringa. Mantenga el extremo afilado alejado
de usted.
Coloque la aguja y la jeringa usada en un recipiente a prueba
de pinchazos. El doctor, enfermera, o una organización de servicio
para los pacientes de SIDA pueden proporcionarle un recipiente
especial para este fin. Si no tiene uno, utilice un recipiente
a prueba de pinchazos con una tapa de plástico, como una lata
de café. Mantenga el recipiente en la habitación donde se utilizan
las agujas y jeringas. Colóquelo fuera del alcance de los niños
o visitantes, pero en un sitio donde usted pueda colocar la aguja
y jeringa fácil y rápidamente luego de utilizarla. Cuando el recipiente
esté casi lleno, séllelo y obtenga uno nuevo. Pregunte a un médico
o enfermera cómo desechar el recipiente con las agujas y jeringas
utilizadas.
Si usted se pincha con una aguja utilizada en una persona con
SIDA, no se atemorice. Las probabilidades de no infectarse son
muy buenas (más de 99%). Sin embargo, usted debe actuar con rapidez
para obtener atención médica. Coloque la aguja en el recipiente
de agujas usadas, luego lávese el sitio del pinchazo tan pronto
como pueda, utilizando agua tibia y jabonosa. Inmediatamente después
de lavarse, llame al médico o a la sala de emergencia del hospital,
sin importar la hora que sea, explique lo sucedido y pregunte
qué otra cosa debe hacer. Tal vez su doctor quiera que usted tome
algún medicamento, como AZT. Si usted va a tomar AZT, debe empezar
tan pronto como sea posible, definitivamente en un lapso de unas
cuantas horas después del pinchazo.
Desechos
Elimine en el inodoro todo desecho líquido (orina, vomito, etc.)
que contenga sangre. Tenga cuidado de no salpicar nada cuando
esté vertiendo estos líquidos en el inodoro. El papel higiénico
y las toallas de papel impregnadas de sangre, semen, fluido vaginal
o leche materna también pueden ser eliminados en el inodoro.
Las toallas de papel, toallas sanitarias y tampones, apósitos
de heridas y vendajes, pañales y otros elementos impregnados de
sangre, semen o fluido vaginal que no puedan ser eliminados en
el inodoro deben ser colocados en bolsas plásticas. Ponga estos
elementos en la bolsa, luego cierre y selle la bolsa. Pregunte
al médico, enfermera o departamento local de salud cómo debe desechar
los elementos impregnados de sangre, orina, vómito, semen, fluido
vaginal o leche materna. Si no tiene bolsas plásticas a la mano,
envuelva estos artículos en suficiente periódico a fin de evitar
cualquier goteo. Utilice guantes al manipular cualquier cosa salpicada
de sangre, semen, fluido vaginal o leche materna.
Relaciones sexuales
Si usted ha tenido o tiene relaciones sexuales con una persona
infectada con el VIH, y no utilizó condones
de látex de la manera correcta cada vez que tuvo relaciones sexuales,
usted también podría estar infectado con el VIH. Usted debe hablar
con su médico o consejero acerca de practicarse un examen de anticuerpos
del VIH: Llame a la
Línea informativa nacional sobre el SIDA de los CDC al
1-800-342-AIDS para obtener información sobre las pruebas de anticuerpos
del VIH así como referencias a lugares en su área en los que usted
puede practicarse una prueba anónima o confidencial del VIH. La
idea de hacerse la prueba del VIH podría asustarle. Pero si usted
está infectado, mientras más pronto lo averigüe y más pronto empiece
a recibir atención médica, mejor será. Hable con su compañero
sexual acerca de las cosas que tendrán que cambiar. Es muy importante
que usted se proteja a sí mismo y a su compañero de la transmisión
del VIH y de otras enfermedades de transmisión sexual. Hable acerca
de los tipos de relaciones sexuales exentos de riesgo de infección
de VIH. Si deciden tener relaciones sexuales (por vía vaginal,
anal o contacto oral), utilice condones. Los condones de látex
pueden protegerlo de la infección de VIH si se utilizan de la
manera correcta cada vez que tienen relaciones sexuales. Pídale
a su médico o consejero más información acerca de las relaciones
sexuales seguras o llame a la Línea informativa nacional sobre
el SIDA de los CDC al 1-800-342-AIDS.