Pasar más allá del descubrimiento del gen y aplicar los nuevos conocimientos en favor de la salud pública requiere investigación y planeación adicionales. Se requieren estudios clínicos y de epidemiología para evaluar la interacción entre la genética y el ambiente como causa de enfermedades y para evaluar la validez y la utilidad de las pruebas genéticas. Se requieren políticas de salud pública para atender los asuntos sociales, éticos y legales asociados a la genética además de garantizar el accesso a los servicios de genética. Otra parte importante de la integración de la genética a la salud pública es el entrenamiento de los empleados de salud pública y el mantener al público informado.

Las actividades de la OGDP reflejan la magnitud del desafío que enfrenta en la actualidad la salud pública. El compromiso de la OGDP es el de enfrentar con éxito el desafío que representa el usar la información genética para mejorar la salud y prevenir las enfermedades en el siglo 21.