Es la incapacidad de los testículos para producir esperma u hormonas masculinas.

Las causas de la insuficiencia testicular son: anomalías cromosómicas, torsión testicular, traumatismo directo a los testículos, enfermedades que afectan al testículo (como orquitis por paperas y cáncer testicular) y ciertas drogas o medicamentos. La condición es poco común y su mayor riesgo está asociado con actividades que pueden causar traumatismo constante a un nivel bajo en el escroto (como montar motocicleta) o la administración frecuente de alguna droga que se conoce que afecta la función testicular (como el uso de marihuana o algunos medicamentos recetados). Los hombres que al momento del nacimiento presentaron un testículo no descendido corren un riesgo mayor.

• Ausencia potencial de la libido (impulso sexual)
• Retraso en el desarrollo o ausencia de características sexuales masculinas secundarias (crecimiento y distribución del vello, agrandamiento escrotal, agrandamiento del pene, cambios de voz)
• Infertilidad
• Ginecomastia
• Falta de masa muscular

El examen físico puede revelar:

• enitales ambiguos (generalmente observados en la lactancia)
• testículos anormalmente pequeños
• tumor o masa (acumulación de células) en o cerca del testículo

Los niveles hormonales determinados a través de los exámenes sanguíneos pueden revelar niveles bajos de testosterona y niveles altos de gonadotropina (hormonas pituitarias HEF y HL).

El suplemento de hormonas masculinas puede ser exitoso para tratar algunas formas de insuficiencia testicular. Cuando esta condición parezca estar relacionada con la administración de alguna sustancia o la práctica de una actividad, la suspensión de la sustancia o actividad puede ocasionar la restitución de la función testicular normal.

Muchas formas de insuficiencia testicular son irreversibles y la fertilidad y/o la libido no se pueden restituir.

La insuificiencia testicular que ocurre antes de iniciarse la pubertad impide el crecimiento normal, específicamente el desarrollo de características masculinas en el adulto.

Se debe consultar al médico si se observan síntomas de este trastorno.

Se deben evitar actividades de alto riesgo o controlar la función testicular cuando se están realizando dichas actividades. Es necesario suspender la actividad al sentir los primeros síntomas.