Es una anomalía de la lengua ocasionada por inflamación.

Los cambios en la apariencia de la lengua pueden ser de carácter primario o ser un síntoma de otros trastornos. La glositis se presenta cuando hay una inflamación lingual aguda o crónica, la cual hace que la lengua se hinche y cambie de color. Las pequeñas proyecciones digitiformes en la superficie lingual (papilas) desaparecen dando a la lengua una apariencia lisa. Ver también lengua geográfica.

Entre las causa de la glositis se pueden mencionar:

• Las infecciones virales o bacterianas (incluso el herpes simple oral)
• La irritación mecánica o las lesiones provocadas por quemaduras, por asperezas en los bordes de los dientes o por los aparatos odontológicos u otro tipo de traumas
• La exposición a irritantes como el tabaco, el alcohol, los alimentos calientes o condimentos
• Reacción alérgica por cremas dentales, enjuagues y refrescantes bucales, colorantes en los dulces, plásticos en las prótesis dentales o en los retenedores
• Trastornos como la anemia por deficiencia de hierro, la anemia perniciosa y otras deficiencias de vitamina B, el liquen plano oral, el eritema multiforme, las úlceras aftosas, el pénfigo vulgar, la sífilis y otros trastornos

Algunas veces, la glositis puede ser hereditaria.

• Inflamación lingual
• Apariencia lisa de la lengua
• Coloración lingual, generalmente roja oscura "encarnada"
  • pálida, si es causada por anemia perniciosa
  • rojo fuerte, si es causada por deficiencia de vitaminas del complejo B
• Irritación y sensibilidad lingual
• Dificultad para masticar, deglutir o hablar

El examen odontológico o médico revela inflamación lingual (o parches de inflamación) y una posible ausencia de nódulos en la superficie lingual (papilas). Si la lesión u otras causas locales no se evidencian con claridad, se le hacen preguntas al paciente para determinar el posible origen de la inflamación lingual. Las causas sistémicas de esta enfermedad se pueden confirmar por medio de exámenes de sangre.

El objetivo del tratamiento es reducir la inflamación y generalmente no requiere la hospitalización del paciente, a menos que la inflamación de la lengua sea severa.

Es necesario tener buenos hábitos de higiene oral que involucren el cepillado completo, por lo menos dos veces diarias y el uso de la seda dental, mínimo una vez al día.

Para reducir la inflamación causada por la glositis se pueden administrar corticosteroides como la prednisona. Si la enfermedad es leve, se pueden suministrar aplicaciones tópicas (como la prednisona en suspensión que se utiliza como enjuague bucal y no se ingiere) para evitar los efectos secundarios de los corticosteroides sistémicos orales o inyectables.

Si la causa de la glositis es una infección, se pueden prescribir antibióticos, antimicóticos y otros medicamentos antimicrobianos. La anemia y las deficiencias nutricionales se deben tratar generalmente haciendo cambios en la dieta o con suplementos; y para disminuir el malestar se recomienda evitar irritantes como el alcohol, los alimentos calientes o picantes y el tabaco.

Si la causa de la inflamación se elimina o se trata, la glositis usualmente responde bien a la terapia. Esta enfermedad puede ser indolora o producir malestar en la boca y en la lengua y en algunos casos puede producir una inflamación lingual severa que bloquea las vías respiratorias.

• Malestar
• Obstrucción de las vías respiratorias
• Dificultades para hablar, masticar o deglutir

Se debe buscar asistencia médica, si los síntomas de glositis persisten durante más de 10 días, si la hinchazón lingual es severa y se presentan problemas para respirar, hablar, masticar o dificultad para deglutir. La obstrucción de las vías respiratorias es una situación de emergencia que requiere atención médica inmediata.

La buena higiene oral que comprende cepillado completo, uso de seda dental, control y limpieza profesional frecuentes pueden servir para prevenir este tipo de enfermedades.

Se recomienda evitar, en lo posible, el exceso de substancias o de alimentos que irriten la lengua y la boca, así como prevenir las lesiones orales.