El nombre suena muy tranquilizador ya que todos sabemos que las cosas tóxicas nos hacen daño. Además estas dietas te alientan a comer alimentos naturales e incluyen mucha agua y verduras, todas las cosas que sabes que son buenas para ti. Escuchas que los personajes famosos hacen dietas de desintoxicación y se dice que las personas que entran a programas de rehabilitación para el abuso de drogas y alcohol están en desintoxicación. Entonces, ¿no debería una dieta de desintoxicación ser buena?

En realidad no. Como muchas otras dietas de moda, las dietas de desintoxicación pueden tener efectos secundarios perjudiciales, especialmente para los adolescentes.

Primero, echémosle un vistazo al vocabulario. Una toxina es una sustancia química o un veneno conocida por sus efectos dañinos sobre el cuerpo. Las toxinas pueden provenir de los alimentos o del agua, de las sustancias químicas utilizadas para cultivar o preparar los alimentos, e incluso del aire que respiramos. El cuerpo absorbe toxinas y luego las procesa mediante órganos como el hígado y los riñones y las elimina a través del sudor, la orina y las heces.

¿Qué es una dieta de desintoxicación?
Las personas a favor de las dietas de desintoxicación sostienen que debido a estrés emocional o deshidratación, las toxinas no abandonan el cuerpo apropiadamente durante la eliminación de los desechos. En cambio, ellos creen que las toxinas se quedan en el aparato digestivo y el gastrointestinal y en el sistema linfático así como en la piel y el cabello. Según los defensores de las dietas de desintoxicación, estas toxinas pueden causar todo tipo de problemas, como cansancio, dolores de cabeza, náuseas, y acné.

De manera que la idea básica detrás de las dietas de desintoxicación es renunciar temporalmente a ciertos tipos de alimentos que se cree que contienen toxinas. La idea es purificar y limpiar el cuerpo de todo lo "malo". Aunque las dietas varían, la mayoría de ellas requiere alguna versión de ayuno, es decir, dejar de comer por un par de días para luego reintroducir gradualmente ciertos alimentos en la dieta. Muchas de estas dietas te alientan además a hacerte una irrigación colónica, también conocida como enema (el enema lava el recto y el colon usando agua), que está diseñada para "limpiar a fondo" el colon. Otras recomiendan que tomes suplementos a base de hierbas para ayudar en el proceso de "purificación".

Hay montones de dietas de desintoxicación dando vueltas. Típicamente, suponen 1 ó 2 días en una dieta completamente líquida y otros 4 ó 5 días en los que se añade a la dieta arroz integral, frutas y verduras cocidas al vapor (todo orgánico). Después de una semana de comer sólo estos alimentos, gradualmente reintroduces otros alimentos, excepto por carnes rojas, trigo, azúcar, huevos y todos los alimentos preempaquetados o "basura", en la dieta.

A las personas que hacen dietas de desintoxicación también se les alienta a masticar bien los alimentos, a beber muy poco mientras comen y a relajarse antes de cada comida (¡aunque parece demasiado llamar comida a un vaso de agua con limón!).

Se afirman muchas cosas sobre los beneficios de las dietas de desintoxicación, desde la prevención y cura de enfermedades hasta una mayor energía para concentrarse mejor y pensar con más claridad. Por supuesto, cualquiera que haga una dieta con bajo contenido de grasa y con alto contenido de fibra probablemente se va a sentir más saludable, pero los defensores de las dietas de desintoxicación afirman que esto se debe a la eliminación de toxinas, y no al hecho de tener menos exceso de peso o a tener un corazón más sano. No obstante, no existe evidencia científica de que estas dietas ayuden a limpiar el cuerpo de toxinas más rápidamente o de que la eliminación de toxinas te hará una persona más saludable y llena de energía.

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