Haga planes por adelantado acerca de los problemas
que podrían presentarse.
La
diarrea del viajero es un problema común. Lleve medicinas (antibióticos)
para tratarla, en cantidad suficiente como para que le alcancen
de tres a siete días. Ciprofloxacin es una medicina común para
la diarrea del viajero. Si usted está embarazada, su médico podría
recomendarle que en cambio tome TMP-SMX (trimethoprim-sulfamethoxazole).
Las
enfermedades transmitidas por los insectos son un problema importante
en muchas áreas. Lleve una buena provisión de un repelente de
insectos que contenga el 30 por ciento o menos de "Deet". En lugares
donde haya malaria o dengue, tome providencias para dormir con
mosquitero, el cual preferentemente haya sido tratado con permethrin.
A menos que necesite hacerlo, evite ir a lugares donde haya fiebre
amarilla.
Pregúntele
a su médico si necesita tomar medicinas o administrarse alguna
vacuna especial antes de viajar. El médico sabrá cuales son las
vacunas seguras para usted. Su médico también conocerá cual es
la mejor manera de protegerlo de la malaria, fiebre tifoidea y
hepatitis. Asegúrese de que esté al día con todas sus vacunas
de rutina. Esto es muy importante para los niños infectados con
el VIH que viajan.
Si
va a salir de Estados Unidos, asegúrese de que sabe si los países
que se propone visitar tienen normas de salud especiales para
los visitantes. Estas normas pueden incluir la administración
de vacunas que podrían no ser seguras para las personas infectadas
con el VIH. Su médico o departamento de salud local pueden ayudarle
con esto.
Si
usted tiene seguro de salud, verifique si lo cubre cuando se encuentra
en el exterior. Muchos planes de seguro de salud tienen beneficios
limitados fuera de Estados Unidos. Muy pocos planes cubren el
costo de repatriarlo a Estados Unidos si se enferma gravemente.
Asegúrese de que su documentación está en regla, y cuando viaje
lleve consigo prueba de que tiene seguro médico.
Cuando
viaje
La comida y el agua en los países
en desarrollo podrían no ser tan limpias como en casa. Pueden
contener bacterias, virus o parásitos que podrían causarl
No
coma frutas y legumbres frescas que no haya pelado usted mismo,
carnes o mariscos crudos o poco cocidos, productos lácteos sin
pasteurizar o cualquier alimento adquirido a un vendedor callejero.
Tampoco
beba agua de la canilla, bebidas elaboradas con agua de la canilla,
hielo hecho con agua de la canilla, o leche sin pasteurizar.
Los
alimentos y agua que son generalmente seguros incluyen comidas
hervidas, frutas que usted mismo pela, bebidas embotelladas (especialmente
las carbonatadas), café o té caliente, cerveza, vino y agua que
usted haya hecho hervir durante un minuto. Si usted no puede hervir
su agua, puede filtrarla y tratarla con yodo o cloro, pero esto
no será tan efectivo como hervirla.
La
turberculosis o TB es muy común en todo el mundo, y puede ser
severa para las personas con VIH. Evite los hospitales y clínicas
donde se trata a pacientes con tuberculosis. Al regresar a Estados
Unidos pida a su médico que le haga hacer un análisis de tuberculosis.
En
muchos lugares los animales podrían deambular con más libertad
que en el área donde usted vive. Si usted cree que los animales
pueden haber dejado excremento en las playas u otras áreas, siempre
use calzado y ropas para protegerse, y siéntese sobre una toalla
para evitar el contacto directo con la arena o con el suelo.
Usted
puede enfermarse si traga agua al nadar. Nunca debería nadar en
aguas que pudieran contener incluso pequeñas cantidades de aguas
servidas o de excremento de animales. Para asegurarse de que se
divierte todo lo posible en su viaje, proteja su salud (y la de
otros) de la misma manera en que lo haría en casa.
Tome
todas las medicinas de la manera en que fueron prescriptas por
su médico.
Si
su médico le ha dado una dieta especial, ajústese a ella.
Tome las mismas precauciones que usted tomaría en casa para no
contagiar a otros con el VIH.