El Día de la Independencia, 2002
proclama presidencial

English version

La Casa Blanca
Washington, D.C.

Cada año, el Día de la Independencia, los estadounidenses honramos y celebramos la actitud valerosa de los fundadores de nuestra nación el 4 de julio de 1776: la firma de la Declaración de Independencia. Con valiente y profunda decisión, nuestros próceres demostraron su amor por la libertad y probaron que estaban dispuestos a luchar y morir por ella. Al honrar la audaz visión de nuestros próceres en esta primera celebración después del 11 de septiembre, los estadounidenses gozamos de una mayor unidad nacional y un aprecio más profundo de lo que más importa en nuestras vidas: nuestra fe, nuestro amor por la familia y los amigos, y nuestra libertad.

En esta nueva era, los estadounidenses compartimos un renovado aprecio por los ideales que hacen fuerte a nuestro país. Nuestros excelentes soldados están luchando y ganando esta guerra contra el terrorismo. Ellos merecen la gratitud de todos los pueblos que atesoran la libertad.

A través de nuestra historia nacional, los estadounidenses hemos demostrado decisión en nuestros esfuerzos por construir una nación libre, en paz y con oportunidades para todos. A medida que tratamos de borrar los oscuros nubarrones del terror de nuestra nación y del mundo, reafirmamos nuestra decisión de preservar el legado de libertad recibido de nuestros ancestros. Al hacerlo, honramos su legado al tiempo que avanzamos en el siglo XXI.

En este Día de la Independencia, rendimos especial tributo a todos aquellos que actualmente brindan sus servicios en las fuerzas armadas así como a nuestros veteranos. Sus contribuciones han sido fundamentales para la defensa de nuestro país y nuestra nación está agradecida.

Laura se une a mí para hacer extensivos nuestros mejores deseos de un Día de la Independencia seguro y memorable. Que Dios los bendiga y que Dios siga bendiciendo a Estados Unidos de América.

George Bush

Washington, D.C.
1º de julio de 2002

Independence Day, 2002
Presidential Proclamation

Versión en español

The White House Washington, D.C.

Each year on Independence Day, Americans honor and celebrate the courageous action that our Nation's Founders took on July 4, 1776: the signing of the Declaration of Independence. With that brave and profound decision, the Founders demonstrated their love for liberty and proved that they were willing to fight and die for freedom. As we honor our Founders' bold vision on this first observance of Independence Day since September 11, Americans possess a greater national unity and a deeper appreciation of the things that matter most in our lives: our faith, our love for family and friends, and our freedom.

In this new era, Americans share a renewed appreciation for the ideals that make our country strong. Our fine service men and women are fighting and winning the war on terror. They deserve the gratitude of all people who cherish freedom.

Throughout our Nation's history, Americans have been steadfast in their efforts to build a country of liberty, peace, and opportunity for all. As we act to lift the dark cloud of terror from our Nation and the world, we reaffirm our determination to preserve our Forefathers' legacy of freedom. In doing so, we honor their legacy as we move forward into the 21st century.

On this Independence Day we pay special tribute to all those currently serving in the Armed Forces and to our veterans. Their contributions have been critical to the defense of our country, and our Nation is grateful.

Laura joins me in extending best wishes for a safe and memorable Independence Day. May God bless you, and may God continue to bless America.

George Bush

Washington, D.C.
July 1, 2002