La Sección de Asuntos Narcóticos

La Sección de Asuntos Narcóticos (NAS) de la Embajada de Estados Unidos de América en Bogotá fue establecida en 1985 y es la oficina de NAS más extensa y compleja en el Departamento de Estado. NAS recibe orientación de programas, apoyo y financiación de la Oficina para Asuntos Internacionales de Narcóticos y Ejecución de la Ley (INL), la agencia ejecutiva a la cual se le asignó la misión de reducir el flujo de narcóticos hacia los Estados Unidos.

La misión de la NAS

La NAS planea y ejecuta las operaciones antinarcóticos financiadas bajo la Ley de Estados Unidos para la Asistencia Exterior y proporciona apoyo en entrenamiento, operaciones, inteligencia y logística a los programas antinarcóticos de Colombia. La NAS proporciona orientación en políticas y estrategia antinarcóticos al Embajador y fondos y apoyo en proyectos especiales y de enlace a otras instituciones de la Embajada y gubernamentales.

Colombia suministra más drogas ilícitas a Estados Unidos que cualquier otro país en el mundo. Es el mayor productor mundial de coca y exportador de cocaína y una fuente creciente de heroína. El 90% de la cocaína y la mayoría de la heroína en el mercado estadounidense proviene de Colombia. Las drogas ilegales de fuente colombiana le cuestan a Estados Unidos 52.000 vidas y US$110 millardos al año según el Departamento de Estado.

Una nueva clase de reto

El narcotráfico se ha convertido en el socio silencioso de todos los grupos armados ilegales en Colombia. Durante los años 90, los narco carteles colombianos reaccionaron ante la interceptación del abastecimiento de coca peruana y boliviana, trasladando el cultivo de coca al rincón sur occidental de Colombia, un área controlada por las FARC (Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia), el grupo insurgente más antiguo y más importante del país. Inicialmente, los guerrilleros cobraron un "impuesto" a los narcotraficantes a cambio de vigilar sus cultivos ilícitos, pero paulatinamente han extendido su control sobre otros aspectos de la industria de narcóticos y actualmente están involucrados en el cultivo, procesamiento y distribución en Colombia y en ciertas otras áreas. Los narco carteles cosechan enormes ganancias, a las cuales tanto las FARC como sus enemigos (las unidades paramilitares de derecha) les cobran para comprar armas y material bélico. A medida que escala la lucha, los dividendos de la droga se han convertido en el sustento del conflicto armado. El narcotráfico forma hoy parte del conflicto colombiano, lo cual aumenta la dificultad de reducir el abastecimiento de drogas ilícitas sin exacerbar los conflictos locales ni desestabilizar la región.

El Plan Colombia

El Plan Colombia del Gobierno colombiano enfoca el proceso de paz, la economía, la estrategia antinarcóticos, la reforma judicial y los derechos humanos, y la democratización y el desarrollo social. Para apoyar el Plan Colombia, el Congreso de Estados Unidos aprobó (y el Presidente Clinton sancionó el 13 de julio de 2000 la ley de asistencia suplementaria por US$1,3 millardos. El Gobierno de Estados Unidos apoya la reforma del sector judicial y los proyectos de desarrollo alternativo y suministra equipos, entrenamiento y asistencia técnica a la policía antinarcóticos y a unidades militares selectas, para incrementar su capacidad de erradicar los cultivos de coca y amapola y la interceptación de cargamentos de narcóticos. Inicialmente se enfoca el departamento del Putumayo en el sur de Colombia, donde están la mayoría de los cultivos ilícitos y donde la mayoría de los grupos armados ilegales trafica en narcóticos.

La financiación de la Sección de Asuntos Narcóticos

Los fondos del Gobierno de EE.UU. a la NAS para el programa antinarcóticos del Gobierno de Colombia se suministran de las apropiaciones anuales del Departamento de Estado y del INL y de la asignación suplementaria al Plan Colombia.

La asignación normal para la NAS es de US$35 millones para el Año Fiscal 2001, con las mayores sumas para apoyo a las operaciones aéreas de la DIRAN (US$12 millones) y para el programa de erradicación de coca y amapola (US$5 millones).

La asignación suplementaria de US$1,3 millardos al Plan Colombia corresponde a los siguientes recursos del Departamento de Estado y del Departamento de Defensa:

PROGRAMA	Depto. Estado	Depto. Defensa	TOTAL
Apoyo al sur de Colombia	$390,5 millones	$51,4 millones	$441,9 millones
Apoyo a la interceptación	129,4 millones
Apoyo a la Policía Nacional	115,6 millones		115,6 millones
Desarrollo alternativo/económico	81,0 millones
Derechos humanos/ Reforma judicial	122,0 millones		122,0 millones
Desarrollo (en otros países)	93,0 millones		93,0 millones
Interceptación (en otros países)	87,0 millones	201,9 millones	288,9 millones
Total	$1.018,5 millones	$300,7 millones	$1.319,2 millones

Apoyo para la Dirección Antinarcóticos (DIRAN) de la Policía Nacional

La NAS proporciona a la DIRAN apoyo en financiación, operaciones, inteligencia, entrenamiento y logística para varios programas. Los 2.800 miembros de la DIRAN representan aproximadamente el 3% de la fuerza de la Policía Nacional de Colombia, de los cuales aproximadamente 1.000 apoyan a la Fuerza Aérea.

Apoyo del Departamento de Estado al Plan Colombia

Incluye US $115,6 millones para programas de apoyo a la DIRAN en 2000-2001. Los programas y proyectos claves son:

Sistemas de comunicaciones

Sistemas de comunicaciones terrestres y aéreos, incluyendo radios compatibles con los que usan las Fuerzas Armadas de Colombia (US$3,0 millones).

Armas y municiones

Armas y municiones para operaciones terrestres y aéreas y defensa de las bases (US$3.0 millones).

Helicópteros UH-60

Dos helicópteros Blackhawk UH-60, complementando los seis proporcionados mediante la financiación de 1999. El programa financia el apoyo operacional y el costo de mantenimiento durante dos años, así como el entrenamiento, armamento, equipos de apoyo terrestre y asistencia técnica (US$26,0 millones).

Mejor apoyo logístico

Un sistema de manejo de combustible para la Policía Nacional, mejora del sistema logístico de la Policía Nacional e integración de los sistemas de la NAS con los de la Policía Nacional para administración financiera, adquisiciones, control de inventarios y vigilancia del uso final (US$2,0 millones).

Protección de las fuerzas y de las operaciones de avanzada

Construcción de una base fronteriza y bases seguras para operaciones de avanzada de la Policía Nacional (US$5,0 millones).

Construcción de bases fronterizas

Construcción de un pequeño número de bases permanentes para la Policía Nacional, además de una mayor cantidad de instalaciones transitorias en bases militares colombianas seguras. Las bases permanentes extenderán la presencia de la Policía Nacional a las áreas claves en las fronteras (US$5,0 millones).

Infraestructura aeromóvil

Equipo aeromóvil, equipo de comunicaciones, entrenamiento, apoyo operacional y construcción del cuartel general y barracas (US$2,0 millones).

Mejora de las instalaciones de aviación de la Policía

Importantes reparaciones estructurales y una nueva rampa de parqueo en Guaymaral, expansión de un hangar y barracas en las instalaciones actuales en Mariquita. La NAS arreglará una parte del nuevo cuartel general y hangar de la Policía Nacional en el Aeropuerto El Dorado en Bogotá (US$8,0 millones).

Aeronaves de fumigación

Nueve aeronaves adicionales de fumigación agrícola (US$20,0 millones).

Mejora de aeronaves de la Policía

Mejoras aeroelectrónicas de hasta 24 helicópteros Huey II y dos Bell 212; blindaje y repuestos para hasta 15 helicópteros Huey II (US$5,0 millones).

Helicópteros Huey II de la Policía

Mejorar 12 helicópteros UH-1 para configurarlos como el Huey II y prestar apoyo logístico a todos los helicópteros Huey II (US$20,6 millones).

Operaciones y sostenimiento

Apoyar las operaciones aéreas y terrestres antinarcóticos de la Policía Nacional con combustible, municiones, raciones y equipos (US$5,0 millones).

Entrenamiento de pilotos y mecánicos

Entrenar los pilotos y mecánicos necesarios para la nueva flota de aeronaves de la Policía Nacional (US$2,0 millones).

Mejoras en la seguridad de las pistas aéreas

Mejorar la seguridad en las bases de la Policía Nacional (US$2,0 millones).

Mejor y mayor erradicación

Equipo, combustible, herbicida y otros gastos operacionales para expandir la erradicación aérea (US$4,0 millones).

Repuestos para helicópteros Bell 212, Huey II y UH-60 así como otras aeronaves de la Policía Nacional (US$3,0 millones).

• Apoyo a la aviación - El Servicio Aéreo de la DIRAN es la flota aérea policíaca más grande de América Latina, con 58 helicópteros y 21 aeronaves de ala fija. El apoyo al Servicio Aéreo representa casi el 50% de la financiación directa de la NAS. La NAS es responsable de los recursos aéreos de EE.UU. (del Departamento de Estado/INL): nueve helicópteros y 14 aeronaves de ala fija, los cuales son operados y reciben mantenimiento por un contratista del Gobierno estadounidense.

  

  El Gobierno de EE.UU. suministró US$96 millones en 1999 y 2000 para adquirir seis helicópteros Blackhawk a fin de mejorar la capacidad antinarcóticos de la DIRAN, con pilotos y técnicos entrenados en EE.UU. La flota de helicópteros Huey se está mejorando con 15 terminados en 2000 y seis previstos para 2001. Con los fondos suplementarios para el Plan Colombia se comprarán nueve avionetas de fumigación y dos Blackhawk adicionales.

  
  

• Erradicación aérea - El proyecto más importante de la DIRAN es el programa de erradicación aérea combinado DIRAN-NAS, el más ambicioso del mundo. El objetivo es la reducción neta anual del cultivo de coca en Colombia, eliminándolo en cinco años. Se respetan estrictamente las disposiciones legales y ambientales.

  El programa de erradicación aérea del Gobierno colombiano con el apoyo de EE.UU., fumigó exitosamente aproximadamente 47.000 hectáreas de coca y 9.000 hectáreas de amapola. Entre el 22 de diciembre de 2000 y el 6 de febrero de 2001, el Gobierno colombiano fumigó aproximadamente 25.000 hectáreas de coca en el departamento del Putumayo. La coca fue fumigada por primera vez en los departamentos de Norte de Santander, Nariño y Boyacá, áreas en las cuales se divisaron importantes cultivos ilícitos por primera vez en 2000. Los grupos paramilitares dominan el comercio de la coca en Norte de Santander y Boyacá, de manera que estas operaciones enviaron el mensaje de que el Gobierno colombiano no tolera narcotraficantes de ninguna clase.

  El único herbicida usado en el programa de erradicación aérea es el glifosato, uno de los químicos agrícolas más ampliamente utilizados en el mundo. Se consigue comercialmente en Colombia y en el mundo entero bajo muchas marcas diferentes. El programa de erradicación aérea usa menos del 10% de la cantidad total de glifosato utilizado en Colombia cada año. El resto se usa en la producción de café; en la presiembra del arroz, algodón, sorgo, cebada y soya; como herbicida en fincas de frutales, plátano, banano y palma africana, y como agente madurador en la producción de caña de azúcar. El glifosato ha sido probado y evaluado extensamente en Colombia, en Estados Unidos y en otros países alrededor del mundo; se usa en más de 100 países para una variedad de fines agrícolas. La Agencia de Protección Ambiental de EE.UU. (EPA) aprobó el glifosato para uso general en 1974 y lo volvió a certificar en septiembre de 1993. Está aprobado por la EPA para uso en cultivos, bosques, áreas residenciales y cerca de áreas acuáticas. Un exhaustivo examen reciente de investigaciones sobre el glifosato concluyó que no existe ninguna prueba que deba crear inquietud respecto a la salud humana: Safety Evaluation and Risk Assessment of the Herbicide Roundup and Its Active Ingredient, Glyphosate, for Humans (Evaluación de seguridad y valoración del riesgo del herbicida “Roundup” y su ingrediente activo, glifosato, para los humanos) por Gary M.Williams, Robert Kroes e Ina Munro.

  La NAS colabora con la DIRAN para preparar a Colombia para asumir plena responsabilidad del programa de erradicación en los próximos años. Se ha establecido un plazo de tres años para la remoción paulatina del contratista estadounidense que proporciona apoyo a los recursos aéreos y a las operaciones de erradicación. La NAS emplea asesores para entrenar a los administradores de la DIRAN en tácticas de aviación, mantenimiento, logística, comunicaciones y capacidades empresariales.

  El programa de erradicación aérea será ampliado en 2001 y 2002. La DIRAN, con el apoyo de EE.UU., planea establecer dos bases adicionales para aviones de fumigación y de escolta. Los objetivos de la erradicación aérea en 2001 son de 50.000 hectáreas de coca y 10.000 hectáreas de amapola.

  
  

• Interceptación - La NAS trabaja con la Policía Nacional de Colombia para desmontar las organizaciones del tráfico de drogas. En este aspecto, la NAS trabaja estrechamente con la Administración para Control de Drogas (DEA) para proporcionar entrenamiento, equipo y apoyo operacional a las unidades investigativas especiales de la Policía Nacional, así como al personal de la Fiscalía General de la Nación. Con fondos de la DEA, la NAS proporciona apoyo institucional para inteligencia e investigación antinarcóticos y para actividades de ejecución de la ley.

  La DIRAN, con el apoyo de la NAS, ha ejecutado un proyecto de interceptación aeromóvil para proporcionar una fuerza de respuesta rápida de apoyo a la interceptación. Una compañía recibió equipo y entrenamiento JUNGLAS en 2000, y otras dos se están entrenando y equipando en 2001. Una compañía tendrá su base en la costa Caribe, otra cerca de la costa Pacífica y otra cerca de Bogotá. La fuerza de respuesta rápida lleva a cabo incursiones para capturar a narcotraficantes, incautar evidencia para un juicio posterior así como destruir laboratorios de HCI y de base de coca, instalaciones de procesamiento de heroína y aeropistas clandestinas. La fuerza de respuesta rápida también apoya los esfuerzos de erradicación de la DIRAN, brindándole seguridad a las avionetas de erradicación y a las bases móviles de erradicación.

  
  

• Control de químicos - El control del desvío de químicos niega a los traficantes los químicos precursores que necesitan para la elaboración de drogas ilícitas. Regula el comercio lícito de químicos usados en la fabricación de drogas ilícitas, garantizando que sólo puedan funcionar aquellas transacciones para las cuales el uso final legítimo ha sido establecido.

  La necesidad del control de químicos ha sido aceptada internacionalmente. El Artículo 12 de la Convención de 1988 de la ONU contra el Tráfico Ilícito de Narcóticos y Sustancias Psicotrópicas establece la obligación para los miembros de la Convención de controlar el comercio de químicos a fin de evitar su desvío hacia la fabricación de drogas ilícitas.

  
  

• Entrenamiento - La NAS financia el entrenamiento intermedio y avanzado del personal de la Policía Nacional/DIRAN. Los cursos de entrenamiento se imparten a través de escuelas e instalaciones del Departamento de Defensa de EE.UU.; los imparten instructores de estadounidenses en Colombia y son contratados comercialmente. Se hace énfasis en entrenar las compañías aeromóviles de erradicación tanto en operaciones independientes como avanzadas con las Fuerzas Armadas de Colombia. La NAS asistió a la DIRAN en la planeación de un centro para ofrecer cursos relacionados con aspectos antinarcóticos, incluyendo JUNGLAS (destrezas de combate y supervivencia de las Fuerzas Especiales de los Rangers), investigaciones médicas, de derechos humanos, de comunicaciones y de narcóticos.

  El curso de entrenamiento JUNGLAS fue creado en 1989. Los aprendices de JUNGLAS cumplen un riguroso programa de instrucción de cuatro meses que combina elementos del curso de calificación de las Fuerzas Especiales del Ejército de EE.UU. y de la escuela de Rangers. Un proyecto conjunto NAS-DIRAN para la construcción de una nueva instalación completamente equipada para entrenamiento JUNGLAS, deberá quedar terminado en 2001.

  El Centro de Entrenamiento Antinarcóticos está situado en la Seccional de Policía Gabriel González en Espinal, Tolima. La NAS proporciona la vigilancia operacional, coordinación del entrenamiento y apoyo logístico. El Centro consiste de tres elementos principales: la sección de seguridad de la base, la sección de entrenamiento en movilidad y un centro técnico/táctico.

  La NAS apoya la continua construcción y el desarrollo de la escuela de aviación de la DIRAN en Mariquita, Tolima. La escuela entrena pilotos colombianos de helicópteros y aeronaves de ala fija para apoyar el programa antinarcóticos. Ésta se ha convertido en un centro de entrenamiento regional que forma a estudiantes extranjeros además de su propio personal.

  
  

• Operaciones - La cooperación entre las ramas de las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional es un importante logro operacional. Las Fuerzas Armadas llevan a cabo operaciones antinarcóticos unilaterales y conjuntas con la Policía Nacional, desplegándose en áreas donde la Policía hace frente a una importante amenaza guerrillera. La Fuerza Aérea, el Ejército, la Armada y la Infantería de Marina coordinan con la DIRAN en operaciones antinarcóticos conjuntas durante las cuales destruyen laboratorios de droga, incautan narcóticos y hacen arrestos. La Policía Nacional y el Ejército han participado en entrenamiento conjunto intensivo para preparar a la nueva brigada antinarcóticos del Ejército, la cual colaborará con la DIRAN en operaciones antinarcóticos en las regiones con cultivos de coca. Actualmente, hay personal de la DIRAN instalado con el primer batallón de la brigada antinarcóticos y el Centro Conjunto de Inteligencia de Colombia en Tres Esquinas.

• Comando, Control, Comunicaciones y Computadoras (C4) - La DIRAN y la NAS han desarrollado conjuntamente una nueva arquitectura que identifica las capacidades y asigna prioridades a las compras con fondos del Plan Colombia.

  

• Infraestructura y Logística - (En preparación)

Apoyo a la Dirección Nacional de Estupefacientes (DNE) del Gobierno de Colombia

• Políticas y concientización sobre drogas - Los funcionarios de la NAS trabajan con la DNE y la oficina del zar antidrogas desarrollando políticas nacionales sobre asuntos relacionados con narcóticos. Estos incluyen la erradicación de cultivos ilícitos, la incautación y confiscación de activos relacionados con los narcóticos, actividades para reducción de la demanda, encuestas, conferencias y productos para los medios con el fin de promover la toma de conciencia pública acerca de los problemas que le ocasionan a Colombia la producción, el tráfico y el abuso de las drogas ilícitas. Las actividades de concientización pública y reducción de la demanda cumplidas mediante la asociación de la DNE y la NAS fortalecen el apoyo social y la voluntad política a favor de las medidas anti-drogas.

  La Dirección Nacional de Estupefacientes (DNE) desarrolla las políticas sobre narcóticos en Colombia, mientras que un nuevo programa en el seno de la Presidencia de Colombia, Rumbos, administra los programas de prevención y reducción de la demanda. Rumbos fue creado en 1998 en respuesta al creciente problema de consumo de droga en Colombia, especialmente entre varones de 12 a 17 años de edad en áreas pobladas y económicamente desarrolladas. Éste trabaja con otras instituciones para garantizar la disponibilidad de centros adecuados de tratamiento y encabeza un programa de reducción de la demanda en el cual participan 18 organizaciones gubernamentales y no gubernamentales. Ayuda a los departamentos y municipios a crear programas locales de prevención y tratamiento. Veintisiete de los 32 departamentos de Colombia reciben asistencia actualmente.

  Los programas de reducción de la demanda de drogas tratan para reducir el uso y abuso mundial y la demanda de narcóticos y sustancias psicotrópicas. La escalada del uso y abuso de drogas cobra un precio devastador sobre la salud, bienestar, seguridad y estabilidad económica de todas las naciones.

  La estrategia de EE.UU. para la reducción de la demanda incluye esfuerzos para impedir que se inicie el consumo, la intervención en “puntos claves de toma de decisiones” en las vidas de las poblaciones vulnerables para impedir el consumo inicial y subsiguiente así como programas eficaces para los adictos. Otros aspectos cubren las campañas educativas y de los medios para incrementar la concientización del público sobre las consecuencias destructivas del uso y abuso de drogas y la construcción de coaliciones comunitarias. Este último esfuerzo implica el desarrollo de coaliciones para la reducción de la demanda en los sectores público y privado para movilizar a la opinión pública nacional e internacional en contra del narcotráfico y para alentar a los gobiernos a desarrollar y ejecutar políticas y programas vigorosos antinarcóticos.

  
  

• Apoyo de EE.UU. para el desarrollo alternativo y la erradicación manual - El Plan Colombia anima a los pequeños agricultores productores de coca a firmar acuerdos para eliminar voluntariamente los cultivos ilícitos a cambio de asistencia gubernamental para el desarrollo de cultivos alternativos. La Agencia de los EE.UU. para el Desarrollo Internacional ( USAID) colabora estrechamente con el Plan Nacional de Desarrollo Alternativo del Gobierno de Colombia (PNDA, antes conocido como PLANTE), para ejecutar estos acuerdos. El PNDA ha firmado doce pactos para que 11.425 familias erradiquen voluntariamente 10.613 hectáreas de coca en Putumayo y tiene planeado firmar otros 32 pactos este año en el mismo departamento. En el año fiscal 2001, la USAID ayudará a aproximadamente 2.500 pequeños productores a erradicar voluntariamente 5.700 hectáreas de coca (3.200 en Putumayo y el resto en Caquetá, Bolívar, y Norte de Santander) y apoya la siembra de aproximadamente14.500 hectáreas de cultivos legales, beneficiando a unas 4.500 familias. A lo largo de cinco años, (2000-2005), la USAID busca la erradicación voluntaria de 3.000 hectáreas de amapola y 30.000 hectáreas de coca, por parte de pequeños agricultores. Los programas de desarrollo alternativo que apoyan la erradicación voluntaria han disminuido la oposición local a la erradicación aérea; un alcalde de Putumayo dijo que aparentemente el Gobierno tenía intenciones de cumplir su palabra y combinar el “garrote” de la erradicación aérea con la “zanahoria” del desarrollo alternativo.

  

• Proyecto para una infraestructura antinarcóticos - El proyecto de infraestructura fortalece las operaciones tanto Concejo Nacional de Estupefacientes (CNE), el cual establece las políticas sobre narcóticos para el Gobierno de Colombia, como de la Dirección Nacional de Estupefacientes (DNE) que forma parte de éste.

Programa de Seguridad Portuaria

Los narcotraficantes utilizan los canales de intercambio comercial para transportar los narcóticos ilegales a los mercados extranjeros. A menudo, el pago se recibe en productos que son ilegalmente introducidos a Colombia como contrabando, por los mismos canales de transporte comercial. Utilizan el soborno, la falsificación de documentos y la intimidación para sacar los productos de los puertos marítimos.

La NAS inició en 1998 un programa de seguridad portuaria, en medio de un difícil ambiente donde policías, funcionarios y operadores portuarios cuestionaban su capacidad para colaborar. Esto ha cambiado y se ha logrado instaurar un programa eficaz. Los puertos proporcionan fondos (US$1,5 millones al año), la Policía aporta su dedicación y la NAS la asesoría técnica. El Servicio de Aduanas de EE.UU. imparte el entrenamiento y las embajadas británica, francesa y holandesa han contribuido con entrenamiento basado en las recomendaciones de la NAS. Actualmente hay cinco puertos claves en el programa (Cartagena, Muelles el Bosque, Santa Marta, Buenaventura y Barranquilla), los cuales cubren casi toda la carga comercial que sale de Colombia hacia EE.UU., Europa, Japón y Asia. El artículo Securing Colombia's Ports [ 3,962k] (Asegurando los puertos de Colombia) ofrece detalles sobre el tema.

Mediante el programa de seguridad portuaria, las autoridades han incautado más de 31 toneladas métricas de cocaína y 60 toneladas de marihuana desde finales de 1998. Para poner estas cifras en perspectiva, en 2000 se incautaron 69 toneladas de narcóticos en América Latina. Los traficantes han respondido con esfuerzos complicados y costosos para usar métodos alternativos para transportar los narcóticos ilegales.

Colombian ports:
Puerto de Barranquilla
Puerto de Buenaventura
Puerto de Cartagena
Muelles el Bosque - Cartagena
Puerto de Santa Marta

Mejora del sistema penal colombiano

La colaboración nacional e internacional entre las organizaciones responsables de administrar la justicia ha generado un fuerte aumento en el número de narcotraficantes enjuiciados. Los esfuerzos para impedir que los encarcelados continúen violando la ley desde el interior de las prisiones han sido insuficientes y los aliados nacionales e internacionales se han unido para instaurar un sistema carcelario menos vulnerable a la corrupción. El Gobierno de EE.UU. ha suministrado US$4,5 millones de la financiación al Plan Colombia para apoyar el programa de seguridad carcelaria.

Proyectos del Plan Colombia para reformar el sector judicial

El Departamento de Justicia de EE.UU., en coordinación con el Departamento del Tesoro, ha designado un programa de asistencia técnica por US$88 millones para fortalecer al sector judicial colombiano y sus instituciones, dándole especial importancia a mejorar la capacidad de administración de justicia en Colombia. El programa se compone de doce áreas de proyectos interrelacionados, que van del desarrollo de fuerzas de tarea en derechos humano, a la lucha contra el crimen financiero organizado, a la investigación conjunta de casos y juicios, a la protección de testigos y funcionarios judiciales.

Los objetivos de los proyectos del reforma del sector judicial son fortalecer las instituciones del sector y sus capacidades; desarrollar un sistema de justicia criminal más efectivo; y fortalecer y mejorar el imperio de la ley como piedra angular de una democracia sostenible.

Programa Cultura de la legalidad