Es el estrechamiento u obstrucción de la arteria que irriga el riñón y es causada por aterosclerosis, displasia fibromuscular de la pared arterial renal o por la formación de una cicatriz en una arteria (Ver también enfermedad renal ateroembólica).

La estenosis de la arteria renal tiene varias causas, una de las cuales es la enfermedad renal ateroembólica que ocasiona el estrechamiento de la arteria renal. La segunda causa más común es la enfermedad fibromuscular, una condición más común en mujeres jóvenes en las cuales el tejido fibroso crece en la pared de la arteria renal, provocando el estrechamiento de ésta. Asimismo, esta condición puede ser causada por la formación de tejido de cicatrización en la arteria renal después de una obstrucción arterial aguda o por una lesión traumática en el riñón.

A menudo, la estenosis de la arteria renal puede causar hipertensión sin otro signo de su presencia y normalmente se descubre al realizar exámenes para investigar la causa de una hipertensión difícil de controlar. De hecho, la estenosis de la arteria renal representa una de las causas más comunes de hipertensión secundaria (ver hipertensión). Este trastorno también se puede descubrir cuando en un examen médico de rutina se escucha un ruido (sonido fuerte) con el estetoscopio en un riñón (auscultación).

En las personas de edad avanzada, la estenosis de la arteria renal se asocia comúnmente con enfermedades ateroscleróticas entre las que se incluye la enfermedad cardíaca ateroesclerótica. La placa aterosclerótica se deposita dentro de la arteria renal y ocasiona la estenosis (estrechez).

La displasia fibromuscular es un trastorno congénito en el que la pared de la arteria renal presenta engrosamiento y causa estenosis de la arteria renal en adultos jóvenes, particularmente mujeres entre los 20 y 40 años de edad.

La estenosis de la arteria renal puede causar insuficiencia renal crónica si ésta afecta ambas arterias renales o si la hipertensión asociada con su condición es prolongada o severa.

Generalmente no se presentan síntomas.

La presión sanguínea de la persona puede ser alta y puede haber antecedentes familiares de hipertensión que es resistente o difícil de controlar. Al realizar un examen médico de rutina se puede escuchar un ruido con el estetoscopio (auscultación) sobre el riñón.

• Un cistograma con radionúclidos puede indicar una disminución en el flujo sanguíneo. El valor de la gammagrafía con radionúclidos se incrementa si la prueba se realiza dos veces: la primera vez antes de una dosis de captopril y la segunda sin captopril
• Una radiografía del riñón, TC de riñón o ultrasonido del riñón que pueden indicar una disminución en el tamaño del riñón y/o una disminución del flujo arterial secundaria a una estrechez de la arteria
• Una arteriografía renal muestra la localización exacta del área estenosada

Este trastorno puede alterar también el resultado de los siguientes exámenes:

• Gravedad específica de la orina
• Prueba de concentración urinaria
• Gammagrafía de perfusión renal

El tratamiento varía dependiendo de la extensión y severidad de los síntomas. Si la estenosis ocasiona insuficiencia renal, el segundo riñón se encarga de filtrar y producir la orina en el organismo. La reparación quirúrgica del área estenosada puede ser posible.

Se puede realizar una angioplastia con balón (un procedimiento radiográfico en el cual se introduce un catéter con un balón en la punta a través de la arteria) o la colocación de un stent a través de la estenosis como método alternativo a la cirugía para la apertura del área obstruida.

Se pueden requerir medicamentos antihipertensivos para controlar la presión sanguínea alta.

La estenosis de la arteria renal puede causar finalmente insuficiencia del riñón si obstruye progresivamente la arteria, lo que puede llevar a insuficiencia renal crónica, si hay sólo un riñón afectado o si ambas arterias renales se encuentran afectadas.

La hipertensión renal causada por la estenosis de la arteria renal puede ser muy difícil de controlar. A menudo, se logra abrir el área estenosada por medio de una reparación quirúrgica o con el uso de un catéter de balón, sin embargo, la estenosis puede recurrir.

• Hipertensión
• Hipertensión maligna
• Insuficiencia renal crónica

Se debe buscar asistencia médica si los antecedentes de la persona indican un alto riesgo de estenosis de la arteria renal. Sin embargo, la disminución del volumen de orina puede ser un síntoma de emergencia que indica insuficiencia renal.

La estenosis de la arteria renal se puede prevenir evitando el consumo de cigarrillo.