La coartación de la aorta es un defecto de nacimiento en el cual la arteria principal que sale del corazón, la aorta, se estrecha en algún punto a lo largo de su recorrido, más comúnmente justo después del lugar donde la aorta se encuentra con la arteria subclavia.

El término coartación significa estrechamiento. En el caso de la aorta es un defecto congénito en el que se presenta un angostamiento en una porción de ésta. La aorta es la arteria fuente para muchas otras que suministran sangre y nutrientes al cuerpo.

La coartación de la aorta provoca presión sanguínea baja y flujo sanguíneo lento en las arterias que se ramifican antes del sitio de estrechamiento. La presión sanguínea alta se presenta en las arterias que se ramifican cerca al corazón. Como resultado, la coartación aórtica a menudo conduce a que se presente presión sanguínea alta en la parte superior del cuerpo y en los brazos (o un brazo), mientras que la presión sanguínea baja se presenta en la parte inferior del cuerpo y en las piernas.

Hay ciertas condiciones genéticas, como el síndrome de Turner, que aumentan los riesgos de una coartación aórtica. Igualmente, esta condición puede estar asociada con anomalías congénitas de la válvula aórtica, tales como la válvula aórtica bicúspide.

Este trastorno afecta a 1 de cada 10.000 personas aproximadamente y suele ser diagnosticado en niños o adultos menores de 40 años.

Los síntomas de la coartación de la aorta dependen de la gravedad en la restricción del flujo sanguíneo. En los casos severos, los síntomas están presentes durante la infancia, mientras que es posible que los casos más leves no se desarrollen hasta la adolescencia. Los síntomas abarcan disminución en la realización de ejercicios, piernas o pies fríos y dificultad para respirar. Otros síntomas pueden ser, entre otros, los siguientes:

• Mareos o desmayos
• Dolor de cabeza palpitante
• Extremidades frías
• Dolor en el pecho
• Hemorragia nasal
• Calambres en las piernas con el ejercicio
• Hipertensión (presión sanguínea alta) con el ejercicio

Nota: es posible que no haya síntomas.

Un examen físico revela presión sanguínea alta en los brazos y presión baja en las piernas con una diferencia significativa entre ambas. El pulso femoral o en la ingle es más débil que el pulso de la carótida en el cuello o simplemente puede estar ausente.

Al escuchar el corazón con un estetoscopio se descubre un soplo fuerte que se puede escuchar por la espalda. Puede haber signos de una insuficiencia cardíaca del lado izquierdo, especialmente en los niños, o signos de una regurgitación aórtica.

La coartación suele descubrirse durante el primer examen físico del neonato o durante un examen de control del niño sano. El médico detecta la ausencia o excesiva debilidad del pulso femoral. Tomar el pulso en un bebé es una parte muy importante del examen, pues es posible que no se presenten otros síntomas ni hallazgos hasta que el niño sea mayor.

La coartación de la aorta se puede confirmar mediante:

• Tomografía computarizada del tórax
• IRM del tórax
• Ecocardiografía
• Ultrasonido Doppler de la aorta
• Radiografía del tórax que puede mostrar también costillas o "escotaduras" de las costillas anormales, debido al agrandamiento de las arterias de las costillas
• ECG que indica agrandamiento del ventrículo izquierdo
• Cateterización cardíaca y aortografía

Tanto el ultrasonido Doppler como la cateterización cardíaca pueden detectar un gradiente de presión aórtica, es decir, una diferencia en presión dentro de la aorta, causada por la coartación.

Se suele sugerir tratamiento quirúrgico y, en ocasiones, la angioplastia con balón, utilizando una técnica parecida a la que se utiliza para abrir las arterias coronarias, pero que puede realizarse en la aorta, como una alternativa a la reparación quirúrgica.

En los casos de cirugía, el segmento estrecho de la aorta se extirpa y luego se repara por medio de una anastomosis, o unión de los dos extremos libres de la aorta, si el segmento de la coartación era corto. En caso de que se deba extirpar un segmento más largo, se puede colocar un injerto de Dacron para llenar la brecha.

La coartación de la aorta es una condición curable con cirugía y se puede esperar una rápida mejoría de los síntomas una vez realizada la reparación. Hay un aumento en el riesgo de muerte de origen cardiovascular en las personas que se han sometido a una reparación aórtica; sin embargo, sin tratamiento, la mayoría de las personas con esta condición mueren antes de los 40 años.

Generalmente, se recomienda realizar la intervención temprana, antes de los 10 años. En la actualidad, el diagnóstico de la coartación y la subsecuente reparación suelen realizarse normalmente en la infancia.

• Aneurisma aórtico
• Disecación aórtica
• Ruptura aórtica
• Hipertensión severa
• Endocarditis
• Hemorragia intracerebral
• Apoplejía
• Insuficiencia cardíaca
• Desarrollo prematuro de la enfermedad de la arteria coronaria (EAC)
• Paraplejía (complicación poco común de la cirugía de reparación de la coartación aórtica)

Se debe buscar asistencia médica si los síntomas indican la posible presencia de una coartación de la aorta e igualmente si se presenta un dolor en el pecho o desmayos, pues éstos pueden indicar una situación de emergencia.

No se conoce la forma de prevenir este trastorno. Sin embargo, el hecho de estar consciente de los riesgos puede ayudar a hacer posible un diagnóstico y tratamientos tempranos.