Es una etapa tardía de una enfermedad inflamatoria causada por la bacteria Borrelia burgdorferi, que se transmite por la picadura de la garrapata del venado.

La enfermedad de Lyme terciaria ocurre de meses a años después de la infección inicial (ver enfermedad de Lyme para mayor información) y entre sus síntomas están manifestaciones cutáneas, neurológicas y musculoesqueléticas.

• Inflamación de las articulaciones, en las rodillas y en otras grandes articulaciones
• Artritiscrónica
• Pérdida de la memoria
• Cambios en el estado de ánimo
• Trastornos del sueño

Los síntomas adicionales que pueden estar asociados con ésta enfermedad son:

• Entumecimiento y hormigueo
• Disminución del estado consciente
• Confusión
• Sensibilidad a la luz anormal

• Un ELISA muestra los anticuerpos contra B. burgdorferi y se realiza un Western blot para confirmar los resultados del ELISA.
• Una punción espinal será anormal si se presentan signos en el sistema nervioso central.

El objetivo del tratamiento es eliminar la infección mediante terapia antibiótica, para lo cual se requiere por lo general una dosis alta de penicilina o ceftriaxona en las últimas etapas de la enfermedad.

Los síntomas de artritis no se logran resolver con el tratamiento, pero otros síntomas deben mejorar con éste.

• Artritis persistente

Se debe buscar asistencia médica si se desarrollan los síntomas, particularmente si la persona ha padecido antes la enfermedad de Lyme o vive en o viaja a áreas de alto riesgo.

El diagnóstico oportuno y el tratamiento antibiótico apropiado para la enfermedad de Lyme primaria es la forma más efectiva de la prevenir la enfermedad de Lyme terciaria.