Es la intoxicación causada por el excesivo consumo de bebidas alcohólicas.

• Alcohol etílico (etanol)

• Bebidas alcohólicas (cerveza, whisky, vino, vodka y otros)

• Incapacidad de caminar de forma normal
• Inclinarse de un lado a otro
• Dificultad en el habla
• Respiraciones lentas
• Vómitos
• Dolor abdominal
• Sangrado intestinal
• Estupor
• Coma

Si un adulto que ha ingerido alcohol en exceso puede levantarse, se debe trasladar a un lugar cómodo donde pueda dormir mientras se pasan los efectos del alcohol. Es necesario asegurarse de que la persona no se caiga ni se lastime. Se debe colocar a la persona de lado en caso de vómitos y verificar con frecuencia para estar seguros de que su condición no está empeorando. Si el paciente está semiconsciente o inconsciente, puede ser necesario solicitar asistencia médica de emergencia. Si existen dudas, SE DEBE LLAMAR para solicitar dicha asistencia.

NO SE DEBE INDUCIR EL VÓMITO, a menos que así lo indique el Centro de Control de Envenenamientos, pues el individuo puede inhalar el vómito hasta los pulmones accidentalmente.

Se debe determinar la siguiente información:

• Edad, peso y condición del paciente
• Nombre del producto, con sus componentes y potencia, si se conocen
• Hora en que se ingirió
• Cantidad ingerida

El personal del Centro de Control de Envenenamientos informará si es necesario llevar al paciente al hospital. Ver Centros de Control de Envenenamientos para buscar el número de la línea directa nacional. Se debe llevar el recipiente del producto a la sala de emergencias.

Se pueden realizar todos o sólo algunos de los siguientes procedimientos:

• Tratar los síntomas
• Intubación
• Administrar líquidos intravenosos y multivitaminas

En los casos de consumo tóxico de alcohol, la supervivencia del paciente durante las primeras 24 horas después de haber bebido generalmente quiere decir que logrará recuperarse.